Trauma muscoesquelético

Algunas lesiones, teles como heridas cutáneas y fracturas, son fácilmente detectables, aunque otras pueden no ser tan evidentes pero no por ello menos peligrosas. La valoración inicial y tratamiento de urgencia más adecuado son esenciales en estos pacientes

Aunque generalmente existen varias formas de estabilizar una misma fractura ,la planificación de la resolución de fracturas es esencial para que el cirujano determine qué técnica es la más simple pero adecuada, para disminuir el riesgo de aparición de complicaciones.

La primera pregunta que todo veterinario debería hacerse a sí mismo es: ¿Tengo la experiencia y equipos necesarios para reparar esta fractura? Si la respuesta es no, entonces es recomendable que el paciente sea tratado por un especialista que pueda realizar el tratamiento más adecuado.

En general los pacientes con luxaciones presentan una cojera sin apoyo de la extremidad afectada y con un gran dolor.

Las luxaciones en las articulaciones suelen ser consecuencia de un trauma y pueden ir acompañada de otras fracturas así como de lesiones de los tejidos blandos, por eso es importante realizar radiografías para descartar una lesión mayor.

En algunas ocasiones podremos intentar realizar la reducción cerrada sin recurrir a la cirugía. Las posibilidades de éxito aumentan cuanto menos se demore la reducción de la luxación.

Si la luxación no se puede reducir de manera cerrado o la articulación se reluxa con facilidad, se recomienda un reducción abierta (cirugía) con estabilización de la articulación.

La artrodesis consiste en un procedimiento quirúrgico encaminado a eliminar el movimiento de una articulación provocando una unión entre los huesos que forman dicha articulación.

Está indicada en procesos que cursen con dolor, inestabilidad y pérdida de función articular  de forma irreparable.

Cómo medida quirúrgica se utiliza para controlar el dolor o en un proceso causado por una enfermedad en la extremidad afectada, por ejemplo un tumor maligno o una gangrena.

Los avances tanto en cirugía como en cuidados para animales que han sufrido la pérdida de una de sus patas hacen que puedan salir adelante y valerse por sí mismos. Hasta el punto de hacer una vida prácticamente normal.

Pueden ser perfectamente felices aunque tengan tres patas.